Invierno y bomba de calor

En este final de enero, inmersos en una nueva borrasca que, como prolongación del año pasado, continua sacudiendo nuestro país, es cuando más que nunca nos acordamos de la bomba de calor aerotérmica y de lo cómoda que resulta nuestra vida en el interior del hogar pese a las inclementes condiciones externas.

Madrid, tanto en invierno como en verano, también sufre estos rigores climáticos y puede paliarlos con aerotermia.

Invierno en Madrid

Debido a que Madrid se encuentra a una altura de 650 metros sobre el nivel del mar, esta ciudad experimenta temperaturas muy diferentes en el verano y el invierno.

Durante el invierno, las condiciones climáticas suelen ser mas rigurosas que respecto a los promedios del país: llueve más y las noches son aún más frías.

De entre los meses que conforman la estación, el que más bajas temperaturas alcanza en Madrid es enero, con una promedio de 6ºC.  De vez en cuando nieva, aunque más allá de la sierra no siempre sucede durante el invierno madrileño.

La bomba de calor y sus ventajas

La bomba de calor es una máquina térmica que consigue una temperatura perfecta, tanto en verano, como en invierno, pudiendo también producir agua caliente, de una forma sencilla, económica y respetuosa con el medio ambiente. Desde que comenzó a comenzó a popularizarse en Europa a finales del siglo pasado, sus prestaciones han mejorado mucho desde entonces.

Según la época del año y de las necesidades de cada usuario, puede utilizarse para calentar o refrigerar, puede enfriar el aire de una habitación “sacando el calor a fuera”, o puede calentarlo trayendo calor de fuera.

En modo calefacción, la bomba absorbe aire del exterior (por ejemplo está, a 0ºC y lo enfría hasta -10ºC. Gracias a un fluido refrigerante, los grados de diferencia se convierten en  positivos y sirven  para calentar el interior de nuestros hogares.

Controlar el consumo de la bomba de calor en invierno

En relación al consumo, hay tres premisas que nunca podremos olvidar si queremos que nuestra bomba de calor optimice su eficiencia todavía más:

• Mantener una temperatura de 20 grados durante el día y 16 grados durante la noche. Por cada grado que se baja la temperatura, se ahorra un 7% de energía.
• No debemos utilizar los equipos como un secador. Hemos de erradicar esa extendida constumbre de procurar un secado más rápido a la ropa acercándola a los equipos, porque ello aumenta la humedad en la estancia, reduce la eficiencia energética del aire acondicionado y el consumo energético es mayor.
• No es necesario preservar en la vivienda una temperatura constante a todas horas . Podemos adaptarla a las necesidades de cada momento del día: apagar cuando no estamos, bajar el termostato por las noches…

Si necesitas ayuda o asesoramiento acerca de los beneficios de la instalación de una bomba de calor aerotérmica, no dudes en contactar con rcastilla, expertos en aerotermia desde hace más de 15 años.